Aquella cinta, La Gran Aventura LEGO, dirigida por los cineastas Philip Lord, Christopher Miller y Chris McKay ya mostraba un mundo de sátira y diversión basado en un buen puñado de personajes construidos a modo de Lego s y el universo de la famosa compañía danesa de piezas de construcción LEGO.
En esa primera película del mundo de LEGO, por supuesto, ya estaba ahí Batman para dar varios de los mejores momentos del metraje. Entonces, ¿por qué no crear una película basada únicamente en su mundo? No había que ser muy avispado para imaginar que esto podría ocurrir. Pero había que hacerlo bien y así ha sido.
Todos conocemos a Batman como personaje pero no tanto su lado oscuro. Es un tipo que busca siempre la justicia y la honestidad y luchar contra el crimen pero en su batalla vemos a un hombre amargado, solitario, algo pretencioso y hasta a veces inaguantable. Ahí LEGO Batman: La Película da en una gran clave a destacar metiéndose muy notablemente en la psicología del personaje -más como Batman que como Bruce Wayne-.
Así que el justiciero enmascarado más exitoso de DC Comics, llega para quedarse en esta nueva entrega en la que toda la aventura gira en torno a él como icono central. Pero lo hace incluyendo estas sombras antes mencionadas. De todos los films realizados sobre Batman -sí, todos los que se han rodado en live-action, series, animación, etc.- este es probablemente el que mejor refleja la soledad y vacío existencial del héroe, tanto en la inmensidad de su mansión como en su relación con el resto de los seres humanos. Solo un siempre leal Alfred parece tener algo de empatía y cercanía por él.
LEGO Batman: La Película es divertida, amena, curiosa y encima está maravillosamente realizada. Hay un montón de personajes, lo cual alegra y da colorido a la trama. Todos los que puedan imaginar los espectadores y fans del universo DC. Y además, LEGO se atreve a ampliar su universo a otras grandes sagas y mundos. Otro acierto total.
Will Arnett y Ralph Fiennes prestan sus voces a los personajes de Batman y Alfred, respectivamente. Además, hay algunas sorpresas con actores como Zach Galifianakis como el alocado y a la vez tierno Guasón, Michael Cera como el chico maravilla, Robin, Mariah Carey como la alcaldesa de Ciudad Gótica y Rosario Dawson como Barbara Gordon/Batichica. Cabe destacar la participación del legendario, Billy Dee Williams, quien da su voz a Harvey Dent/Dos Caras, personaje que llego a encarnar en el film de Tim Burton en 1989, Batman.
Todo superhéroe necesita su némesis y aquí está la obsesión del Guasón por ser importante en la vida de Batman pero éste tiene otros problemas: él mismo. Su relación con Robin, la idea de descubrir lo que es el trabajo en equipo y el tener su propia familia son mensajes latentes.
También son curiosas y agradables todas las metareferencias que la cinta proclama a todo tipo de épocas por las que pasó el personaje, con sus trajes y esa curiosa incorporación de onomatopeyas, como en el clásico televisivo en que Adam West daba vida a Batman.
No resulta una sorpresa que la película funcione como un tiro por su grandísima mezcla acertada de humor, entretenimiento y excelente animación con las figuritas de Lego. Hasta la contraseña para entrar a la Baticueva es otra joya divertidísima -y hace referencia a un gran personaje de Marvel-.
Introducirse en el universo de las dos películas de Lego produce una sensación que va generando excitación en clave de entretenimiento, la sonrisa continua, la locura bien lograda entre fotogramas. El mundo de LEGO en sus películas es una diversión total.